Lunes 15 de Junio de 2015
Miguel Darío Bitar murió minutos después del accidente en el HIGA. Había llegado tras protagonizar un violento choque en la esquina de Sarmiento y Dulbecco.
La muerte lo encontró cuando volvía a su casa después de trabajar toda la madrugada. Miguel Darío Bitar tenía 27 años, dos hijos y mucho futuro por recorrer, pero el caótico tránsito juninense le jugó una mala pasada y se convirtió en la sexta víctima fatal en lo que va del año, una cifra que de mantenerse superará la de 2014, que fue en este sentido uno de los peores de la historia.
El joven llegó al Hospital Interzonal de Agudos con vida, pero las serias lesiones en su cabeza (en el resto del cuerpo solo presentó un raspón en la rodilla derecha), le ocasionaron la muerte a los pocos minutos, a pesar del denodado esfuerzo de los médicos por salvarlo.
Bitar había sufrido un accidente en la esquina de Sarmiento y Dulbecco, poco después de las 7:20 de ayer.
El joven salió de su trabajo, en cercanías de la UNNOBA, minutos antes del accidente. Cuando llegó a la esquina de Sarmiento y Dulbecco a bordo de su Yamaha Crypton, se encontró con la trompa de un Peugeot 207 gris.
El impacto, que dejó serios daños a la parte delantera del auto, hizo volar a Bitar por el aire, que cayó a unos metros del lugar del impacto. Su cabeza (no llevaba casco), golpeó contra el asfalto, generando lesiones severas, que terminaron costándole la vida.
Móviles del CPC llegaron al lugar a los pocos minutos, al igual que una ambulancia del servicio de emergencias médicas, que trasladó al joven motociclista hasta el HIGA.
Un muerto por mes
El 2015 comenzó marcado por la muerte de Francisco Valianti, el jubilado ferroviario que falleció tras colisionar contra un carro estacionado sobre calle Arenales, entre Moreno y Villegas, cuando circulaba en su moto, el 13 de marzo pasado.
Pocos días después, el sábado 21 de marzo, dos jóvenes mujeres murieron en sendos accidentes de tránsito. El primero ocurrió a la tarde, sobre Ruta Provincial 65, a la altura del Puente del Inca, cuando una joven de 19 años, identificada como Jacqueline Mariel Mancho, murió en el acto tras ser arrollada por un Ford Focus.
Ese mismo día, a pocos minutos de la medianoche, Patricia Soledad Cepeda, de 28 años, falleció debido a las gravísimas lesiones que sufrió al ser embestida por un Renault Clio en la esquina de Chile y Winter. La joven fue despedida de la moto y terminó pegando de lleno contra los escalones del Club Mariano Moreno.
El 6 de abril, Ezequiel Ortiz, de 24 años, murió tras haber permanecido en cuidados intensivos por más de 15 días, después de sufrir un accidente de tránsito en la esquina de Juan B. Justo y General Paz.
Al parecer, el motociclista, que no llevaba casco, viajaba en el mismo sentido que un auto Peugeot 308 blanco, por General Paz. Al cruzar la intersección con Juan B. Justo, el joven habría intentado adelantarse al automóvil con tanta mala fortuna que uno de los pedalines del rodado se enganchó en el paragolpe del vehículo.
La motocicleta hizo una parábola delante del auto, al cual le quedó cruzado el paragolpe, arrojando a Ortiz contra el cordón de la ochava de esa esquina, en la que se golpeó fuertemente la cabeza.
Pocos días después, el 18 de abril, Marcelo Hornos moría tras estar, al igual que Ortiz, en terapia intensiva durante siete días. El joven, de 21 años, había protagonizado un accidente en la intersección de Arias y Derqui.
En el choque intervinieron dos motos, algo que es cada vez más común en nuestra ciudad, poco después de las 19 horas del sábado 11 de abril. El otro conductor solo sufrió heridas leves. Salvo Valianti, el resto de las víctimas, fueron menores de 30 años y todos circulaban en moto al momento del accidente.