Miércoles 27 de Julio de 2016
Empleados y profesionales de la obra social presentaron denuncias que describen un mecanismo aceitado entre empresas prestadoras de servicios y la falta de controles, con sospechas de irregularidades sobre todo en concepto de sobreprecios.
El titular de IOMA Junín, Marcelo Pastormerlo, afirmó ayer en una entrevista con Democracia que “hay seis empleados que están suspendidos y sumariados” por decisión de la dirección central de la obra social.
Y, según pudo averiguar este diario, hay dos empresas que prestaban servicios -que están siendo investigadas por la justicia por presuntas irregularidades- que fueron dadas de baja el 26 de junio último, por resolución unilateral del directorio.
“Eso lo resuelve IOMA La Plata. Yo soy un mero gerente administrativo, no tengo rol resolutivo. Se las da de baja porque IOMA entendió que, por distintas auditorías sobre prestaciones que se habían hecho, era lo mejor”, dijo Pastormerlo.
“No puedo decir nada sobre la investigación. Hay seis personas en IOMA que están sumariadas y suspendidas. IOMA tiene más de veinte empresas que realizan prestaciones de este tipo y se resolvió unilateralmente derivarlas a otras empresas”, dijo.
“El interés de nuestra gestión es llevar adelante una administración transparente. Es decir, que exista un plan global de auditorías, es central, tanto de prestaciones como de prestadores, y después, en la medida de lo necesario, una ampliación de los prestadores. Son dos situaciones que transparentan el todo. Si tenés prestaciones que están cautivas, eso no hace a la transparencia.
El afiliado debe poder recurrir a un determinado número de prestadores de una misma prestación. Si una empresa realiza una prestación como es la internación domiciliaria, debe cumplir ciertos requisitos. Se debe auditar tanto a la empresa como a la prestación”, dijo.
“IOMA es una obra social que tiene una cobertura médico-asistencial. A partir de ahí, cualquier prestador que esté en condiciones de prestar el servicio se debe inscribir. Si IOMA lo aprueba lo incluye en la cartilla.
Luego, cualquier afiliado de IOMA consulta la cartilla y elige. Así funciona. Es abierta la inscripción pero IOMA revisa institucionalmente si el profesional está capacitado. Lo mismo los sanatorios y demás”, agregó.
Cobros indebidos
“El de los cobros indebidos es otro gran tema. IOMA permanentemente hace seguimiento junto con el Círculo Médico de casos en los cuales se cobra además del bono, cuyo valor fija IOMA, una suma por fuera. Todo el tiempo se hacen auditorías. Es un trabajo permanente. Hay denuncias, las corroboramos y si es necesario hacemos las presentaciones correspondientes. Si ocurre, IOMA toma la denuncia e impulsa el trámite correspondiente”, afirmó.
“Yo llegué un miércoles, ya no recuerdo la fecha, el viernes hubo un allanamiento y al poco tiempo IOMA resolvió la suspensión y los sumarios. Lo que nosotros hacemos es designar médicos auditores, que hacen controles en terrenos, que revisan si lo que se está haciendo es lo que corresponde. A veces se deniega y a veces se solicita una ampliación del planteo médico. No siempre se rechaza el trámite de plano, es más bien un ida y vuelta”, dijo.
Sobre la investigación judicial, Pastormerlo dijo: “No estaba, no era parte de la gestión y no es correcto que opine de oído”.
La justicia investiga, entre otras conductas, la de negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, en los términos del artículo 265 del Código Penal. Cabe recordar que empleados y profesionales de la obra social presentaron denuncias que describen un mecanismo aceitado entre empresas prestadoras de servicios y la falta de controles, con sospechas de irregularidades sobre todo en concepto de sobreprecios.
