Martes 6 de Septiembre de 2016
Pudo realizarse la donación de varios órganos, tras un importante operativo que tuvo limitaciones dada la inoperancia del Aeródromo local.
La médica Romina Jourdone, la técnica en Electrofisiología María Gnazzo y la enfermera Mariana Parrucchi, integrantes del equipo interdisciplinario que se ocupa de la ablación de órganos en el Hospital Interzonal de Agudos de Junín, se refirieron a un caso de ablación multiorgánica realizada en Junín.
La misma tuvo lugar el domingo último, en el Hospital de Junín. Según lo manifestado por las especialistas, siete personas se habrían visto beneficiadas por esta intervención.
Operativo
De acuerdo a lo expuesto por las entrevistadas, el martes 30 de agosto, tras sufrir un ACV hemorrágico, se detectó un Glasgow 7 en una paciente que estaba internada en Terapia Intensiva de Adultos del Hospital. Explicaron que Glasgow es una escala que mide la gravedad neurológica, que en este caso era alta.
A este tipo de pacientes, en general, se les hace un seguimiento a través de distintos estudios como son el electroencefalograma y test de apnea.
Los días pasaron y el domingo 4 de septiembre, a las 10.35 se determinó la muerte cerebral de esta mujer, que sería oriunda de Ascensión y falleció a la edad de 39 años.
La familia había manifestado que era donante, por lo tanto se inició un operativo para ablacionar sus órganos, a cargo del Cucaiba.
El equipo se puso en acción y tuvo rotundo éxito. Su corazón fue llevado al Hospital Italiano; el hígado, al Hospital Austral; un riñón y el páncreas, a la Fundación Favaloro; el otro riñón y las córneas al Cucaiba, donde a su vez se hacía la distribución.
Respecto a los inconvenientes que se generan en estos casos, por no estar habilitado el Aeródromo, las entrevistadas señalaron que se dan varios problemas.
“Al ser una ablación de corazón – explicaron- los tiempos para el implante son cortos, no más de tres horas. Al no funcionar el Aeródromo local, los equipos que se trasladaron vía aérea tuvieron que bajar en Pergamino, donde estaban nuestras ambulancias esperándolos. Fueron acompañados por policías al ser trasladados a Junín, donde se hizo la ablación, y luego, de vuelta con policías, para que los tiempos fueran más cortos”.
“Es que en el trayecto vía carretera deben hacer una hora por camino de tierra, cuando para llegar a tiempo para el implante no deben tardar más de tres para que sea dirigido al quirófano”, señalaron.
Las entrevistadas manifestaron que este problema se da desde hace tiempo, sin que hasta el momento se observe alguna solución. Los aviones no pueden aterrizar en Junín y esto ha ocasionado graves inconvenientes en operativos de ablación anteriores, incluso algunos directamente no pudieron hacerse.
“El último operativo podría haber sido multiorgánico, pero solo pudo ser de riñones, y en el anterior estaba previsto que fuera un multiorgánico pero directamente no se pudo hacer porque el paciente sufrió un paro cardíaco”, recordaron.
Por el éxito de la última ablación, las entrevistadas agradecieron a la familia, que siempre estuvo dispuesta y fue solidaria, con mucha entereza ante semejantes circunstancias.
Explicaron que actualmente se aplica la ley de ablación que data del 2006, la del “Donante presunto”, salvo que se demuestre lo contrario, deslinda responsabilidades a la familia y respeta la voluntad de la persona.
