Viernes 9 de Agosto de 2013
A doce días del inicio de la toma del predio ubicado en la prolongación de la avenida 9 de Julio, los integrantes de “Vecinos sin techo” aún no encuentran una respuesta concreta a su reclamo.
Sin embargo, el desalojo, que se proponía como el “Día D” este lunes, justo después de las elecciones, cambió de fecha.
Así lo aseguraron desde el propio predio, desde donde por ahora mantienen cierto hermetismo sobre cuáles serán los pasos a seguir en materia de presión, en su búsqueda de solución a la problemática habitacional.
Según la información que pudo recoger el diario La Posta, la nueva fecha límite que tienen los integrantes de “Vecinos sin techo” para abandonar el lugar es el 20 de agosto.
Además de la notificación de la nueva fecha para el desalojo, que fue informada el último miércoles a horas de la tarde-noche, se supo que ayer un grupo de vecinos mantuvo una reunión con el escribano y presidente del club Rivadavia, Roberto Cirigliano, quien es propietario de buena parte de los terrenos ocupados.
Este hecho fue confirmado por “Vecinos sin techo”, sin embargo decidieron no dejar trascender detalles de la reunión hasta tanto no sean asesorados por un letrado.
El que sí expresó su opinión sobre la problemática fue el propio escribano, quien a través de una solicitada marcó postura sobre la realidad por la que pasa no sólo él como propietario, sino que fue más allá y dejó plasmada su crítica hacia los sectores políticos, el Gobierno comunal y los medios de comunicación.
“Ante la toma de los terrenos, se crea, sin lugar a dudas, una convulsión intensa en la sociedad. Primero, estupor; luego, preocupación y, al presente, una angustia y un miedo generalizado”, manifiesta Cirigliano en la solicitada. Y agrega: “La gente que está en los terrenos, temiendo el desalojo y la población, con ese mismo sentimiento, por la posibilidad que esto se naturalice y se generalice”.
Además deja su crítica sobre el accionar político: “En el medio, todo el abanico político en pleno período preelectoral, que en vez de aunar criterios, bajar decibeles, buscar una solución, empieza una caza de brujas para encontrar a los responsables políticos de esta toma organizada”. Y Sigue: “Se plantean especulaciones de todo tipo, se trata de saber a quién más perjudica políticamente esta situación, sumado esto a actos demagógicos y de agravios, que tan cansada tienen a una sociedad que no pierde la esperanza de ver, en su clase dirigente, una muestra de madurez”.
En cuanto a los medios, expresa: “A su vez, parte del periodismo toma partido sin un mayor análisis de la situación, lo que lleva a una confusión aún mayor”.
A su vez, vuelve a hacer referencia sobre el sector político y el Gobierno: “Seguimos dirimiendo cuestiones políticas, en medio de una realidad tan angustiante como peligrosa. Estamos jugando con fuego”.
En este contexto indica: “Seamos coherentes, busquemos soluciones posibles”. Y los exhorta: “Partidos políticos, Concejo Deliberante y departamento Ejecutivo, traten en forma unificada de convencer a quienes ocupan los terrenos de una salida pacífica, con la promesa firme de una solución real, haciendo hincapié en que los terrenos, de prosperar la iniciativa original con el Municipio, serán adjudicados a quienes, objetivamente, los necesiten. Tal vez parezca demasiado lírico, pero el riesgo es grande”.
Y finaliza: “La tranquilidad de una ciudad, aunque la subestimemos, está en peligro. Espero, de todos nosotros, que, por una vez y para siempre, pensemos “en grande” y sin egoísmos”.